Amistad

El mejor amigo esta dentro de ti.

Abandono

La estupidez me persigue desde pequeña.

Historias sin final

Ayer perdí mi tiempo en el abismo del desconcierto, trajinando pensamientos distantes del momento. Y  cansada de quemar carbohidratos y demás potingues bioquímicos corporales, me chuté un té y un libro sazonado con música, volviendo a sentir la tierra bajo mis pies, dejando las nubes de mi turbación vacio.
 

Hablar

Lamemos las palabras, como si su dúctil permeabilidad entrara en el pensamiento ajeno, y olvidamos que el pensamiento de los demás esta encriptado en algoritmos solo legibles para ellos.

Página en blanco

Si encuentro las palabras, te escribiré.

Renacer, que no es poco.

Conocer  cuando acaba tus espectativas no debe de llevarte a deseperar, habrá que reinventarse, en el fondo ¿no lo hacemos todos los días?

Ja, ja....

Dibujar una sonrisa enmascara la tristeza.

Escuela vacía.

De la adversidad siempre se aprende, de la prepotencia se empobrece.

Perdida

De ascendente serpiente, según el horóscopo chino, utilizaba sus palabras y su mirada para serpentear por los recovecos de las mentes de los demás. Suave y sin ruido, rodeaba a sus víctimas paralizándolas e hipnotizándolas para así poder robarles sus voluntades. Una vez alcanzaba sus objetivos, ellas perecían cuán trapo viejo desprovisto de conciencia y su despertad, no dejaba huella de lo sucedido, pero esa parte de su cerebro generaba las toxinas inoculadas cambiando a un comportamiento ajeno a ellas. Y la serpiente seguía su camino, cambiando su piel y buscando una nueva víctima a la que seducir.

Verdad

Llamó a su madre, y ella le respondió: 
- ¿Qué quieres cariño?.
- Mamá, el día que mueras ¿cómo quieres que te entierre?.
Ella dibujo una sonrisa en los labios, ¡cuanto tiempo hacia que nadie le hablaba con palabras desnudas!
- Hijo, sorpréndeme.

Enemigos a la fuerza

¿Tus amigos son tus enemigos?

Ecuación imperfecta

Restamos felicidad, sumamos desgracias y el resultado es insatisfación.

Malestar general.

El malestar es un síntoma que a veces no tiene cura, no lo puede adormecer ningún analgésico, tan sólo la confianza en uno/a mismo/a y el ser benevolente con nuestra naturaleza puede calmarlo.

Tozudez

Encendió su ordenador, y el proposito de año anterior estaba de nuevo escrito pero no cumplido.