lunes, 4 de marzo de 2013

Verdad

Llamó a su madre, y ella le respondió: 
- ¿Qué quieres cariño?.
- Mamá, el día que mueras ¿cómo quieres que te entierre?.
Ella dibujo una sonrisa en los labios, ¡cuanto tiempo hacia que nadie le hablaba con palabras desnudas!
- Hijo, sorpréndeme.


2 comentarios:

Joselu dijo...

Genial, auténticamente sorprendente este microrrelato. A mí también me gustaría que me sorprendieran con mi incineración… pero vete a saber…

txusman dijo...

me has dejado con los ojos como platos...
vaya... me vas ha dejar pensando un rato...

Un saludo